miércoles, 19 de enero de 2011

Esperpento con pinganillo

(Supongo que esta entrada tendrá sus detractores, pero decirles que está escrita desde mi opinión personal, expresando únicamente mi opinión personal, que respeto todas las demás y sencillamente espero que respeten la mía)


Aclarado este punto me gustaría hacer un hueco en el blog para decirles algunas cosas a sus Señorías, ya que opino que el hecho de que para entenderse en el hemiciclo necesiten traductores me parece tan esperpéntico que raya, (si no la sobrepasa) en la estupidez.



Distinguidas Señorías;

Supongo que para ustedes roza lo orgásmico poder hablar en su lengua vernácula dirigiéndose a otros Senadores españoles en el Senado de la nación española, pero respóndame, ¿Por qué en los pasillos o en la cafetería del mismo Senado se expresan entendiéndose perfectamente todos en castellano?

Sé que los casi 400.000 euros al año que va a costar al estado (o sea a nosotros) el que ustedes puedan usar el pinganillo de la traducción instantánea les parecerá de risa, un gasto insignificante en el cómputo global del presupuesto anual que manejan. Saben que creo yo, que lo que ustedes están haciendo es reírse de nosotros, especialmente de los más de 4 millones de parados que soporta el país, de todos aquellos a los que han recortado las pensiones, de los que necesitan de la ayuda social para seguir malviviendo un mes más. Que la insignificancia del gasto no mejorará el déficit de la nación, lo sé, pero también sé que nos harían 400.000 euros menos pobres.


Me repito de nuevo, supongo que para ustedes debe rozar lo orgásmico poder hablar en su lengua vernácula, pero y cuándo reciben la traducción en su flamante pinganillo de uno de sus compañeros (o debiéramos empezar a llamarles camaradas) Senadores y solo está traducido al castellano, porque ustedes pueden hablar catalán, vasco, gallego o valenciano, pero todas las traducciones las reciben en castellano, (o sea que lo entienden y hablan perfectamente), como les sienta, como una patada en sus diplomáticas partes o es que lo han solicitado así porque son muchos los que temen no comprenderlo todo en su lengua y prefieren que se lo expliquen en castellano.



Si tanto deseo tienen en que en el Senado puedan escucharse todos los idiomas oficiales del estado, cosa que creo muy correcta, porqué no dan un paso adelante y lo hacen ustedes mismos, no es demasiado difícil se lo aseguro, yo mismo hablo y escribo dos lenguas, catalán y castellano, y muchas veces, después de explicar o tratar un tema en catalán, seguidamente lo he explicado o tratado en castellano (y viceversa) si alguien no hablaba una de las dos lenguas, o por respeto a los que las hablan, de esa manera todos me han entendido, y les prometo que nunca necesité ni se me ocurrió que una tercera persona para que tradujera lo que yo decía de una lengua a otra.



Y ahora contéstenme sinceramente, no creen que están haciendo el ridículo, realmente cuando lo hablan entre ustedes no se sonrojan, no les entra la vergüenza al verse en el Senado con toda la parafernalia y después hablar tranquilamente en el descanso, no creen que los catalanes, vascos, valencianos, gallegos, andaluces, mallorquines, etc. realmente desean que ustedes aborden otros temas con más calado político y menos repercusión mediática.



Yo sencillamente les pediría que no nos sigan tomando por idiotas, legislen, actúen, aprovechen sus “buenos” sueldos, sus ventajas para poder jubilarse con la pensión integra, sus dietas, etc., pero dejen de hacer demostraciones de lo esperpénticos que pueden llegar a ser.



atte., Miguel Adrover Caldentey



(Fotos: La Razón)

lunes, 17 de enero de 2011

flor de almendro

Poesía visual, la flor blanca del almendro con destellos rosas sobre sus ramas desnudas, una vez más Mallorca cambia su fisonomía.




Sus campos se llenan de árboles en flor, su olor cambia, por una vez el aroma de flores sustituye al del marino mediterráneo, la delicadeza de sus pétalos y pistillos hace que estén expuestas siempre al viento, es frágil como el aleteo de una mariposa, su aroma embriaga como los ardientes besos de la persona amada.

Es un milagro en invierno, lentamente va tiñendo de blanco los campos de la isla, se adelanta a todos los demás árboles, es virgen, es primera, es la magia que nos anuncia que de las ramas hasta ahora secas, de nuevo brota la primavera.

 
Texto y fotos; Miguel Adrover Caldentey