sábado, 30 de enero de 2010

Hoja de papel en blanco

Desde un rincón de la nada


nacen las palabras mudas,

desde el vacío inexistente

el más absoluto de los silencios,

en la cercanía del infinito

sombras se unen a las penumbras,

mientras mis ojos recorren

la hoja de papel en blanco.



La soledad de las multitudes

evoca en mí, recuerdos inconexos,

en mi interior vagan,

realidades y sueños,

juntos el ayer, hoy y mañana

danzan frente a mí en brazos del viento,

una danza imposible

en la que están mis sentimientos,

mientras mis ojos de nuevo recorren

la hoja de papel en blanco.



Espiral de percepciones contradictorias

que mortifica mis sensaciones vacías,

como amañada ruleta de feria

en la cual nunca se obtienen musas

únicamente puedes, algún día,

atrapar alguno de tus sentimientos,

y mientras otra vez mis ojos recorren

esta hoja de papel en blanco.



Pues yo me pregunto y siempre sin respuesta,

Como podría expresar la sensación de una caricia.

Que ejemplo podría explicar la tibieza de una lagrima.

Como lograr compartir el dolor y la tristeza.

De que manera obtener la frescura de una risa.

Como hacer percibir el sabor de la sangre ajena.

Que palabras unir para describir el amor.

Que verbos usar para evocar el dolor.

Como hacer para llenar esta hoja en blanco.



Es como tenerte a ti mismo como enemigo,

intentando engañarte conociendo de antemano el engaño,

jugando a un juego que a pesar de ser tú solo

la mayoría de veces tú eres el que sale perdiendo

tu enemigo, papel limpio, impoluto, blanco

te sonríe, se burla, te reta

tú le mimas, le acaricias, le besas

él se resiste, lucha, se rebela

y al final como siempre, te vence, te gana

y tú, cansado del brillo cegador

de aquella maldita hoja en blanco,

impotente la arrugas, la rompes, la tiras

y vuelves una vez más a refugiarte

en un rincón de la nada.

Texto y foto; Miguel Adrover Caldentey

viernes, 29 de enero de 2010

Pensamiento único


Por desgracia creo que cada vez más nos estamos envenenando como sociedad y empiezo a pensar que el tan comentado y a la vez criticado “pensamiento único” se está adueñando del poder de decisión de la mayoría de las sociedades modernas actuales.


Cada día creo más en que los poderes mediáticos y políticos nos están sumergiendo en una base de datos desde donde controlan con precisión quirúrgica las reacciones de la sociedad.

No comprendo como día a día vemos casos flagrantes que a nivel individual nos repatean los intestinos, y como sociedad pocas veces alzamos la voz, asistimos con expectación a los discursos del presidente Zapatero en Davos diciendo que España es un país que saldrá fortalecido de la crisis, vemos como se permite dar consejos a los demás países para evitar el paro, o de cómo asegura que la seguridad social de nuestro país esta fuerte.

Al mismo tiempo, si miramos a la calle, todos sabemos que al 98% de españoles nos cuesta llegar a final de mes, hay más de 4 millones de parados, nuestra economía conjuntamente con la de Grecia están a la cola de Europa, y la seguridad social si no se ponen medidas en 25 años no podrá atender la demanda, ni sufragar las pensiones.

Asistimos perplejos como la mejor solución es alargar la vida laboral de los españoles hasta los 67 años, que se aumentan los periodos obligatorios de cotización para recibir una pensión, y las pensiones son deplorables en la mayor parte de los casos.

Pero mientras, no se escucha ninguna voz crítica en los medios de comunicación, los editoriales de los periódicos parecen escritas por el mismo escribano aceptando esta politica de parcheo que en cualquier momento nos rebentará entre las manos, los sindicatos siguen sin decir esta boca es mía ni salen a la calle, quizá alguién tiene miedo de perder la silla, el presidente de la CEOE sigue en su puesto después de haber generado una de las crisis más importantes en la pasada navidad arrastrando a una empresa a la quiebra dejando a miles de ciudadanos sin poder volar, los controladores aéreos cobran una burrada y se permiten amenazar con huelgas encubiertas si les tocan el sueldo, los políticos inmersos en casos judiciales aumentan día a día, y lo peor de todo, alguno sale entre aplausos y vítores de sus convecinos. No sé, que queréis que os diga, a veces me encantaría poder hacerme ciudadano de otro mundo

Cuando al ciudadano de a pie, el normal que cada día va a comprar el pan y que entra a trabajar en una jornada de ocho horas para a final de mes recibir una nómina que muchas veces no sobrepasa los mil euros, después de todas las patadas que recibe tiene como única posibilidad ver programas de "corazón corazón", "salvames de luxe", "grandes hermanos", "mira con quien me he acostado", "cuantas cirugías llevo" o los cientos que están a su alcance y esa es la única droga que se le suministra gratuitamente para aniquilar las percepciones sensoriales que hacen que se este quieto, creo que si, que el poder está más allá, mucho más,  de donde podemos imaginar y poco a poco, nos han mediatizado hasta conseguir ese “pensamiento único”.

Mientras, tengamos cuidado, que si alguna vez llegan a conocer que los colores nos gustan, que nos dejan ser un poco libres todavía, quizá a alguien se le ocurra devolvernos al blanco y negro.




Un saludo a todos



Texto y fotos; Miguel Adrover Caldentey

martes, 26 de enero de 2010

Las fábulas de la mariposa




Hoy, mientras dejaba que mi mente se relajara, me venían a la memoria dos fábulas relacionadas con las mariposas.


En la primera, la mariposa ilusionada por haberse enamorado locamente de una estrella, desoye los consejos de todas las otras mariposas que están a su alrededor y cada noche sale a ver a su amada, cada noche se eleva más en el cielo, y así, noche a noche va descubriendo nuevos horizontes, nuevas bellezas, ve las luces de la gran ciudad, ve el mar, descubre la belleza de las montañas.


Cada día el amor hacia su estrella crece ya que comprende que a pesar de no llegar a ella es ese amor el que le ha hecho descubrir las maravillas que la rodean mientras la gran mayoría de mariposas que conoció un día han perecido al acercarse demasiado a las bombillas que les han quemado sus alas debido a la urgencia de acercarse o encontrar un amor en el que cobijarse.



En la segunda, una bella mariposa descubre un cuidado jardín, su presunción y el desmesurado placer que le proporciona hacer alarde de su belleza hace que se confíe cuando el jardinero se deshace en halagos hacia su hermosura, encandilándola con palabras bellas y frases del estilo “eres la reina del jardín”.




Su desmesurado ego hace que se pavonee ante tantos alardeos hacia su belleza por parte del hombre y no es consciente de lo que realmente significa ser su “reina” hasta que se siente morir al ser traspasada con un alfiler para terminar clavada en el centro de todas las demás mariposas que formaban la colección del jardinero.









Yo ya he decidido volar cada noche más alto para acercarme a “mi” estrella



















Texto y fotos: Miguel Adrover Caldentey

lunes, 25 de enero de 2010

Carta a los que juzgan

A veces, al exponer tus ideas, tu manera de entender nuestro paso por el mundo, te enfrentas a unos ojos que son el fiel reflejo de un juicio de valores que tu no comprendes, ni aceptas, ante esos ojos que se creen con derecho a juzgar, me planto firmemente y les pregunto, les digo, les hago escuchar lo que no quieren oir, y lo hago sin anestesia. De todas maneras, les veo insensibles, pero no por ello me callo, quiero que me respondan, pero termino por responder por ellos.



¿Cuando empieza el final del principio?

Quien me puede decir donde está el inicio o el fin.

Quien puede asegurarme si estoy dentro del círculo,


o el resto del mundo esta fuera del círculo.

A las doce termina un día,

o a las doce comienza otro.



Si no me podéis asegurar cosas tan elementales

porque me juzgáis,

tampoco lo sabéis

porque no soy como vosotros

por eso,

porque soy diferente,

y lo diferente os da miedo



Estáis tan centrados en vosotros mismos

que creéis que lo diferente es malo

que lo que no es igual es peligroso,

que lo que no comprendéis es oscuro.





Soberbios y arrogantes fariseos

con aroma de naftalina

lo que tenéis es miedo,

tenéis miedo a probar

y vuestro miedo más grande

es que si lo probáis

lo nuevo os guste.



Texto y foto: Miguel Adrover Caldentey

domingo, 24 de enero de 2010

Salí a buscar el paraíso

A veces nos imaginamos mundos fantasticos,  intangibles a nuestras manos, lejanos paraísos que están plagados de belleza, de tranquilidad, cuyos rincones nos sorprenderán por sus maravillosos tesoros, en forma de color, de imágenes, esperamos ver ese lugar idílico que con sus maravillas nos atrapará para siempre.



Hoy he decidido buscarlo, por ello esta mañana me he colgado la cámara al cuello y he salido de casa para ir a su búsqueda.

Mientras buscaba el camino, (tengo la suerte de vivir en el campo) he visto una minúscula flor que sobresalía entre las demás, y con paciencia para evitar que el aire la moviera he tomado unas imágenes.





Seguía pensando hacia donde dirigir mi búsqueda, cuando he escuchado unas tórtolas revoloteando cerca de la charca, intentando no hacer ruido, moviéndome lentamente, intentando pasar desapercibido y sin molestarlas, me han dejado acercar.


Fue muy bello verlas bebiendo, disfrutando de la tierra, jugando entre ellas, y sin que mi presencia les fuera algo molesto. Me quede un largo tiempo observándolas, pero tenía que buscar mi paraíso y debía irme, por lo que empecé a retroceder para salir de la finca, necesitaba tomar un camino para encontrar ese paraíso que había ido a buscar.







Ya que no quería molestar a la tórtolas ni a otros pájaros que estaban trinando cerca, me fijaba bien por donde caminaba para no hacer ruido, por lo que pude ver como una mata de romero que esta cerca empezaba a florecer.








Que delicadeza su flor azul, no podía irme sin tomar unas imágenes, de nuevo plante el trípode, y realice varias fotos.




Cuando ya casi había decidido si dirigirme hacia el mar o hacia la montaña para ir a la búsqueda de ese paraíso imaginado, vi cerca de la entrada como el rosal enano que desde el otoño pasado estaba en letargo, había iniciado la floración, y ya tenía varias rosas de una belleza impresionante.


Comprenderéis que me parara otro rato a admirarlo.

Cuando quise darme cuenta, ya era casi el mediodía, y no era ya el momento para acometer grandes aventuras, por lo que me resigne y decidí que ese paraíso imaginado debería seguir esperando.



Dedicado especialmente a ti María, porque a veces los paraísos imaginados se convierten en realidad.

Texto y fotos; Miguel Adrover Caldentey