domingo, 29 de agosto de 2010

Viaje interior 5 (La coherencia)

Muchas veces, mientras recorremos el viaje interior de cada uno, nuestros actos de hoy se pueden encontrar en confrontación con los del ayer, nos sumergimos en tal vorágine de pensamientos, de ideas, de sensaciones, que nos parece que nuestra vida es un número de circo que se desarrolla a una velocidad increíble, nos sentimos trapecistas y demasiadas veces dudamos si tenemos red que nos proteja en caso de caernos, entonces surgen los temores, y esos incrementan todavía más nuestras dudas.

Es entonces cuando quizá conviene examinar nuestra manera de vivir y sentir, sobretodo, si en ella existe la coherencia.
Si buscamos en el diccionario la palabra coherencia nos la definirá como;
1. f. Conexión, relación o unión de unas cosas con otras.
2. f. Actitud lógica y consecuente con una posición anterior. (Lo hago por coherencia con mis principios)

En el viaje de cada uno, en nuestra vida, la coherencia siempre será muy importante a la hora de no entrar en contradicciones entre nuestro yo interior y nuestra mente pensante, quizá esa coherencia es nuestra mejor ayuda para entender que cada uno de los cambios que se van sucediendo en nosotros mismos, son cambios en pos de una evolución que vamos aceptando cuando la comprendemos y a la que llegamos con mayor o menor rapidez en nuestra vida, (cada caminante tiene su paso).

Y lo más importante, esa coherencia nos hará aceptar con plenitud que somos entes cambiantes, que no seguimos una línea recta y preestablecida, sino que podemos cambiar, que podemos virar de manera de ver y pensar, y que ello no es malo cuando estamos siendo fieles a nuestra manera de sentir y de pensar.

¿Quién me obliga a no cambiar de pensamiento?, la única respuesta que debemos aceptar y que debemos considerar como valida es; Nadie. Quizá hoy me atraiga más una religión que otra, quizá me incline a seguir una corriente filosófica en vez de la que estaba siguiendo, o sencillamente, antes me gustaba más la playa y ahora adoro la montaña. Pero lo que es importante es que sea coherente en cada momento con mi manera de vivir, mi manera de respetar, mi manera de sentir lo que estoy haciendo.

Esa coherencia en mi manera de sentir y vivir no tiene nada que ver con que sea contradictorio con mi forma de actuar o pensar anterior, que varíe mi rumbo, que mis actuaciones de hoy en algún momento sean contradictorias con las que pude hacer en el pasado. Probablemente mi viaje interior, así como voy abriendo puertas, así como se van derribando muros, ese camino que descubro cada día propicie que vaya cambiando en mis actuaciones.

Si nos anclamos en lo que un día creímos como un ideal, en lo conocido, o simplemente en lo aceptado, quizá un día tengamos que respondernos a una pregunta crucial, ¿Porqué no fuimos realmente nosotros mismos? Si no hay respuestas, esa pregunta dolerá, y dolerá mucho.

Seamos conscientes de que podemos cambiar, y después del cambio, un día quizá nos preguntemos porque anteriormente no tomamos esa u otra decisión, si ese día llega, entonces sencillamente y con coherencia debemos poder respondernos que en ese momento sentíamos lo que estábamos viviendo, actuábamos de acuerdo a nuestros ideales, creíamos en lo que estábamos haciendo, y lo considerábamos lo correcto y adecuado.

Tenemos que ser conscientes en nuestro interior del engaño al que nos sometemos nosotros mismos cada vez que actuamos de manera diferente a la que sentimos para lograr que alguien apruebe nuestras actuaciones, cuando lo hacemos para satisfacer a otros renunciando a nuestra manera de ser, cuando nuestra actuación provoca una ruptura entre lo que pensamos y lo que sentimos, o entre lo que sentimos y lo que hacemos.

Si conseguimos esa coherencia en nuestro interior independientemente de nuestras actuaciones exteriores, si en nuestra manera de vivir y sentir seguimos esa línea de coherencia, nos posibilitará a que nuestra línea de pensamiento pueda ser evolutiva, cambiante, abierta, exploradora, insaciable. Y ello nos supondrá que entre nuestro interior y nuestro yo pensante no se produzcan fisuras que nos hagan sentir esas rupturas de personalidad que muchas veces vienen dadas por una manera de actuar incongruente con uno mismo, provocada por el servilismo hacia la manera de actuar, de vivir, de sentir, de otros o de la sociedad.



Texto y fotos; Miguel Adrover Caldentey

15 comentarios:

  1. Coherencia....que buen punto para la reflexión del hilo conductor de nuestras vidas. Se necesita una visión amplia sobre nosotros mismos, sobre nuestra historia, sobre cómoy porqué hicimosese capitulovitalde esa y no de otra manera.....
    Conocerse...mirarse con mirada amiga, sincera, leal....Conocerse, punto de partida para cualquier paso nuevo, viaje interior...viaje sin fin, quizás ,el único viaje real.
    De nuevo, tu post, en la mesilla de noche....se necesita volver a él, y ver reflejados en ellos la propia vida...
    Gracias, por este nuevo punto a tener tan encuenta en este "increible", impresionante, apasionante viaje de vida. Gracias por compartirlo.
    Mi abrazo, mi beso, compa

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  2. Coherentes,una hermosa palabra que se emplea muy poco.Díficil de llevar a cabo en los tiempos que corren.
    Me encantó tu entrada.
    Besos.

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  3. Olá amigo
    Essa série que você está postando, nos leva a várias reflexões.
    Grande abraço

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  4. miguel quiero leerlo despacio pero te queria comentar ... que te he dedicado un premio que te va como anillo a dedo en cuanto lo vi te recordé esta en el baul de mis cuentos, pasate caundo quieras..un abrazo Begoña

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  5. hermoso post Madroca!
    es para meditarlo

    Namasté amigo!

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  6. ¿para cuando el libro de autoayuda? :)

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  7. Hola Miguel. Estoy de acuerdo con ser coherente con el momento presente, así como intentar ser fieles a lo que sentimos, pensamos, etc. Pero, ¿no es necesario aceptar que a veces existe incoherencia entre nuestra mente, emociones, cuerpo y entorno? ¿Y que eso también forma parte de lo que somos? Estamos sometidos a corrientes que afectan de distinta manera a las distintas partes de nosotros mismos. Quizá haya épocas en las que todas están en consonancia, pero otras no, y creo que es necesario aceptar esa incoherencia e intentar dar a cada parte lo que necesita. De otro modo renunciamos a la riqueza de nuestra vida.

    Muy bueno tu post sobre la aceptación, y te dejé mensaje en el de la comunicación. Gracias, compañero.

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  8. Entiendo que cuando somos coherentes con los que sentimos es cuando llega la paz tan buscada, coincido Miguel con vos cuando decis que podemos cambiar todo el tiempo de gustos e ideas, lo bueno es ser fiel a nuestros sentimientos a lo que nos dicta el corazón.
    Te agradezco el paso por mi blog,que Dios te bendiga.

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  9. Hola Madroca , tu blog ha sido seleccionado para el dia internacional del blog el día 31 de agosto, es cuando se celebra este día de bloguer.

    Felicidades y un abrazo de MA para ti.

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  10. Gracias por estos viajes, por estas reflexiones, por darme que pensar una vez más. Me alegró encontrarte de nuevo en mi vuelta.

    Un abrazo amigo.

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  11. Interesante tema. Creo que ser cherentes requiere conocernos interiormente y cuando logramos ese conocimiento , la coherencia aparece como las flores en la mañana. Escribes estupendo, con exquisita sensibilidad. Me encantó leerte y te sigo. Un abrazo.

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  12. Nos has dejado un post invalorable Madroca.

    Coherencia y sentido común,lo he leído con total detenimiento.

    No tiene desperdicio.

    Gracias y abrazos.

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  13. ....Ya me lo he lido sosegadamente...escribes tan profundo ,tan facil de seguirte tan cercano
    a temas tan vitales para nuestro caminar, o vida o proyecto!!!!Coherencia has dejado que brote en mi el anhelo , de buscarla de encontrarla . de tropezarla y vivirla..
    Estoy encantada con el premio que has recibido te lo mereces por tu escribir y tus fotos llenas de momentos mágicos, doy gracias a la vida por el dia que te lei por primera vez...quede maravillada de encontrar un blog tan acorde con mi pensar y búsqueda desde aquel dia te siento como un amigo, con el que aprendo y rescato palabras y pensamientos que estaban dormidos...ekarrikasco Mikel. Un abrazo muy fuerte de Begoña

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  14. Ante todo debemos conocernos como hijos de Dios, presente en nuestro interior desde siempre.
    A la vez y cuando eso es asumido con verdadera humildad, debemos dejar al alma haga de espectadora de nuestra parte más superficvial, la personalidad. Es entonces cuando la coherencia hace su acto de preséncia y podemos llegar a discernir en el bello acto de la meditación.



    Muy bello texto.
    Felicidades.
    Gracias.

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  15. Hay un aspecto que se repite en la experiencia humana: mucha gente sabe lo que tiene que hacer, pero no hace lo que sabe. Acumula información, quizás incluso se inspira por un momento, pero no desarrolla los hábitos para poder utilizar consistentemente lo que sabe. A veces de ahí vienen las contradicciones, pienso yo.
    El secreto de la vida creo que es crecer constantemente, encontrar una manera de mejorar nuestras vidas para que cada día podamos vivir con pasión y diseñar nuestras vidas.

    Estupendos artículos.

    Un abrazo. Ana

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